lunes, 9 de diciembre de 2013

El otoño que se va . . .

¿Se lo llevará el viento?

Se acaba el Otoño. Un otoño especial, sin duda. Tardío dicen algunos, poco adecuado para las fotos, se quejan otros, poco lluvioso, dicen las estadísticas, cada uno tiene su propia opinión, a fin de cuentas "Cada uno cuenta la feria según le va". Y mi feria ha ido muy bien. 

Como en tantas cosas, tomé una decisión al respecto, allá por el mes de septiembre, decidí que este año iba a disfrutar de una estación que nunca me ha gustado, a pesar de haber nacido en ella. Las circunstancias, al menos al principio, eran muy propicias,  y aunque luego han cambiado, ya no era plan de echarse atrás . . . 

Sonidos de otoño: El viento meciendo las cambiantes hojas en los árboles, amenazando con tirarlas, y arrastrando las ya caídas por aceras y caminos. Los crujidos, nuestras pisadas, pájaros que se adaptan a sus mutantes moradas, todo se llena de sonidos, y el agua, en fuentes o riachuelos, acompañando el progreso de los cambios . . .  

Luz de otoño: Días que se acortan, atardeceres que se adelantan, horas de luz que se reducen, pero eso no resta nada al esplendor de un montón de atardeceres hermosos. Tengo muchos en mi haber de este otoño, algunos, en mi cámara, otros en el móvil, muchos en mis retinas y algunos muy especiales en mi alma . . .  

Colores de otoño: Lo he dejado para el final, precisamente porque los colores han sido los grandes protagonistas: amarillos, ocres, anaranjados, marrones, rojizos, de todo ha habido en un otoño muy fotográfico.
  
He participado y disfrutado de varias actividades destinadas a fotografiar el otoño, incluso organicé una, y han sido jornadas muy agradables en las que compartir: colores, fotos, bocadillos, paseos, charlas, risas, amistad, y luego cafés calientes (incluso con tarta) para recuperarnos del frío exterior. 

Un banco como éste, fue testigo de una tarde mágica de rayitos de sol otoñales, allá por el 29 de Septiembre
El balance no puede ser más positivo, ha sido un otoño muy enriquecedor, porque incluso los malos tragos, que también los ha habido, me han servido para reforzar lazos de amistad, para sentirme querida, reconfortada y apoyada.  Tengo muchas fotos, muchos recuerdos agradables, muchos sentimientos cálidos, muchas experiencias, mucha complicidad, mucha música en el corazón . . .

En fin, tod@s sabéis cuál ha sido vuestra contribución a que este balance sea tan positivo, gracias por la parte que os toca . . . ahhhhh y no os olvidéis que cuento con vosotros para el invierno (tampoco es mi estación favorita).

El Tiemblo 19/10/2013 y Aranjuez 02/11/2013

El Escorial  16/11/2013 / Madrid Río, un día cualquiera... 


sábado, 23 de noviembre de 2013

Mis esenciales. Parte I: La música

La música: amiga y compañera


La música forma parte de mi vida, una parte muy importante.


Mil cosas no serían iguales en mi vida, si la música no formara parte de ella. Mis recuerdos no serían los mismos, si no fuera por aquellas canciones que forman parte de mi banda sonora.

Hay canciones que te impulsan a hacer cosas, algunas son idóneas para trabajar entre pucheros, otras te empujan a caminar más deprisa cuesta arriba, las hay que te inspiran a la hora de crear, o que te activan cuando te vence el cansancio, o que te serenan cuando has tenido un día de nervios. 

Algunas tienen efectos mágicos, consiguen que tus pies se muevan solos, o tus hombros o tus caderas, o que tu corazón lata más deprisa. Te abrazan cuando te sientes sola, te acunan cuando tienes sueño, te acompañan en las esperas, (los "ya voy" los inventé yo, que me canto mientras espero a que descolguéis el teléfono, y a veces me pilláis . . .)


La música me acompaña en mi ocio y también en mi trabajo, en ocasiones me distrae, y en otras me ayuda a concentrarme. Me imprime ánimos cuando flojeo, y me serena cuando las emociones me pueden. Está a mi lado en las actividades cotidianas y también en las ocasiones especiales.

Muchos sabéis que de vez en cuando como con Barry, o que George no me falla nunca, que Rod se ganó mi corazón, aún más, allí en Tenerife, que me conmueve Caetano, que no me resisto a la sensualidad de Ney, al que adoro, que Miguel me canta al oído lo de Morena Mía,  que pokito a poko Chambao se hizo un hueco importante en mi vida, que Grover, Sade, Enya, y la música celta viven en mi habitación y no en el salón con el resto. . .
Me gustan muchas cosas, muchos estilos, escucho música en inglés, en castellano y por supuesto en brasileño. 

Para ilustrar esta entrada tan musical he dudado entre poner un video o una foto, y al final opte por ambas. La foto, soy yo escuchando música, y en esta ocasión soy fotógrafa y fotografiada.

La elección del vídeo, ha sido un poco más difícil, hay mucho donde elegir . . . 

Al final he optado por una canción que se ha convertido en casi un himno en los dos/tres últimos meses para mi. Es un tipo de canción que me arrastra más que otras. Éstas que empiezan pausadas, y crecen, se elevan, y tú creces y te elevas con ellas, luego, de pronto, se remansan, pero es sólo para coger impulso y volver a crecer y a elevarte hasta la siguiente cima. Así deberían ser las historias de amor, suaves, pausadas al principio, para después ir creciendo de manera incontrolable, cogiendo fuerza, ganando altura hasta que necesitas parar, para tomar aliento, y nuevamente dejarte arrastrar hacia la siguiente cumbre . . . 


En la música es fácil dejarse llevar, en las historias de amor no tanto.  Hay que ser valiente para amar, y arriesgar, y apostar, porque ciertamente puedes perder, pero es la única manera de ganar . . .


(Aclaración: El video es "Broken Strings" de James Morrison ft Nelly Furtado, por si vuestros dispositivos no os dejan verlo.)

Hoy 7 de Agosto de 2014, celebrando la vida, con Ravel y su fantástico bolero...

lunes, 21 de octubre de 2013

Micro relatos 3 - "Sueños húmedos"

Sueños húmedos



Habían atravesado la capa de nubes y un sol radiante bañaba todo el interior del avión, también del dormitorio de a bordo que, afortunadamente, estaba insonorizado . . .

Se encerraron dentro al subir al avión y a medida que descendía la temperatura exterior durante el ascenso, aumentaba la temperatura del dormitorio, mucho más de 4 grados . . . Su piel, su contacto, sus caricias, sus besos, sus manos sobre sus pechos turgentes, sobre su entrepierna húmeda . . .

¿Húmeda? Esa humedad la despertó, afortunadamente no estaba en un avión, porque por encima de su prominente  vientre pudo comprobar que acababa de romper aguas . . . 


Bueno, aquí llega la explicación al desconcierto que han causado mis últimas entradas, en el primer micro relato, alguien me anima a participar en un concurso de micro relatos, y yo me resisto, pero utilizo esa discusión para ilustrar el experimento. 

El segundo le destino a despedirme de mi amiga Ligia. 

Éste fue el tercero y definitivo que mandé al concurso, ciñéndome a los requisitos: menos de 100 palabras, y debiendo comenzar por: "Habían atravesado la capa de nubes y un sol radiante bañaba todo el interior del avión". Han publicado hoy el ganador y yo he recuperado la propiedad de mi relato, así puedo enseñároslo . . . me está gustando la experiencia, así que habrá más.

jueves, 17 de octubre de 2013

Mi primer medio siglo


Hoy cumplo 50 años


¡¡¡¡Tengo tantas cosas que celebrar!!!!!

Estaba pensando en escribir una entrada del blog contando:

Que cumplo 50 años, y que estoy encantada . . .

Que he empezado la celebración el día previo, comiendo pastelitos portugueses con mis compañeras de brasileiro . . .

Que hace 3 años que soy ex-fumadora . . .

Que tengo unos planes fantásticos para celebrar mi cumpleaños con amigas (e invitados de sábado) el fin de semana, y que estoy ansiosa por arrancar . . .

Pero luego pensé que mejor me iba a celebrarlo y os lo contaba a la vuelta, pero de pronto han dado las doce, y Nati ha colgado en mi muro un fantástico video confeccionado con un montón de fotos mías y toneladas de cariño de todas ellas, cuando he conseguido dejar de llorar (¡vaya semana que llevo!) he puesto un comentario agradecido que no consigue, ni por asomo, reflejar toda la emoción, el agradecimiento y el cariño que les profeso.

Esta semana lo he hablado con más de una persona, es un privilegio disfrutar de la amistad entre mujeres adultas y yo soy una persona muy afortunada por contar con ellas en mi vida. 

Hoy no hay foto, hay video, y espero que os guste tanto como a mi. Soy yo en estado puro, vista a través de los ojos de mis amigas, un placer y un privilegio, me siento emocionada y agradecida, y no voy a buscar el diccionario de sinónimos para ponerle más nombres a algo que por mucho que me esfuerce en describir, sólo será una aproximación a lo que mi corazón siente . . .

Gracias, a todas, os quiero,


lunes, 14 de octubre de 2013

Micro relatos 2 - "Despedida . . . sin cierre"

 Despedida . . . sin cierre



Nunca me ha gustado, siempre son momentos difíciles para mi. 

Nuestra vida debe continuar en el rincón del mundo que nos corresponde.

La misma vida que nos unió, es la que ahora nuevamente nos separa. 


No me gusta despedirme.

Sólo nos unen los finos hilos de seda que se trenzan entre las personas que se quieren y que se alejan porque la vida sigue. Llorar es siempre triste, pero hacerlo entre los brazos de una amiga mientras te dice que te quiere, es una sensación extraña, dulce y amarga a la vez . . . 



domingo, 13 de octubre de 2013

Micro relatos 1 - "Cuando querer es poder..."

Cuando querer es poder...



 Y él le dijo:
-¿Por qué no lo haces, reina?
Y ella dijo:
- Porque no es mi estilo
Y él le insistió:
-Tú puedes con eso y con mucho más.
Y ella se resistía:
-No es mi estilo, yo soy como mucho de minis, nunca de micros...
Y él continúo animándola:
- Será porque no te lo propongas, sabes que puedes encajar, que se te daría bien, está en la linea de lo que te gusta y sabes hacer.
Y ella cedió, y lo hizo y lo contó.
Y eran 91 . . . 



miércoles, 21 de agosto de 2013

Yo me decepciono, tú te decepcionas, nosotros nos decepcionamos


Lo confieso, combato mal la decepción. 

Me diréis que como todo el mundo, pero no es cierto. A todo el mundo le afecta, pero no a todos de la misma manera. Ésto es, como el "umbral del dolor" cada persona lo vive de una manera diferente, y yo reconozco que lo llevo muy mal. 

Probablemente, sea por mi manera de ser. Tiendo a ilusionarme con las cosas, con las personas,  con los proyectos y me aplico a cada cosa que emprendo (o reemprendo) con entusiasmo. Ya,  ya sé que no todo el mundo tiene que ser como yo, no lo pretendo. Pero eso hace que para mi sea un poquito más doloroso que para el resto. 

Siempre procuro escribir en el blog con una actitud positiva y llena de buenas intenciones, pero un año y un día después, de explicar el porqué del título me ha parecido pertinente hacer uso de ello y contaros a tod@s las cosas que me molestan y que me hacen daño, para que si os sentís reflejados en alguna de ellas, sepáis que ME DUELE, luego podéis seguir, como siempre, haciendo lo que queráis, pero no quiero que me digáis:
 "¿Te molestó? Pues habérmelo dicho, mujer"

Voy a parafrasear a Sabina con una canción que me resulta muy agradable, y conste que yo sí soporto el rap: 



No sopor, no sopor, no soporto: 

En general no soporto la falta de seriedad y de compromiso. Cuando un@ se compromete a algo, sea llamar, contestar, visitar o lo que sea, si luego no lo hace, alguien al otro lado, se ha quedado esperando pacientemente, su llamada, respuesta o visita, que no se ha producido . . . Si así ha sido, lo próximo que debería salir de la boca del incumplidor/a (sea el día que sea), debería ser una disculpa.

No soporto que alguien me diga "de todas maneras, luego hablamos" y que luego no hablemos.

No soporto que alguien me escriba: "ahora tengo que salir, pero te llamo uno de estos días y nos organizamos" y que se acabe ese mes, y otro y casi el siguiente . . .

No soporto que alguien cargue sobre mí, culpas que no tengo, porque piensen que yo debería haber hecho algo que no hice, y que nadie me pidió, cuando ell@s fueron los que metieron la pata. Y encima se pongan dign@s . . .  

No soporto preocuparme por alguien, que presumo que no lo está pasando bien, y que (aún leyendo mis mensajes) no se digne a contestar.

No soporto que después de aguantar carros y carretas me acusen de no involucrarme lo suficiente.

No soporto a la gente lastimera, que no hace nada por mejorar su situación.

No soporto la hipocresía, ni los besos falsos, ni el "cuanto me alegro de verte" si no te sale del fondo del alma, ahórratelo . . . 

No soporto los abrazos por compromiso, si no lo deseas, no lo hagas, nadie te lo ha pedido . . .

No soporto cuando alguien se despide diciéndote, "bueno a ver si quedamos un día de estos y tomamos algo", una vez que les has solucionado "la papeleta" que les trajo a ti, cuando ambos sabéis que no volveréis a veros hasta la próxima campaña.

No soporto la deslealtad, así, sin más.

No soporto la gente indiscreta, ni a los que hablan para la platea, como si el resto del mundo no pudiéramos sobrevivir sin sus palabras, ni a los que gritan en los sitios públicos. 

Como le recordé a alguien no hace mucho: "Yo no pido casi nada, casi nunca, pero exijo respeto y si alguien dice que va a hacer algo, espero que lo haga." Y si uno mismo no respeta su propia palabra ¿cómo le va a pedir al resto del mundo que lo haga?

No quiero parecer más intransigente de lo que en realidad soy, pero es que en las últimas semanas voy a decepción por semana, y ya me rebosa, por lo que he decidido vaciar el recipiente y empezar de nuevo. Como hablaba con mi amiga Patricia hace un rato, (gracias Patricia, por ser, y por estar), de vez en cuando hay que hacer sitio en el almacén,  soltando lastre, no quedándoselo dentro, porque ocupa un espacio precioso, que puedes rellenar de cosas hermosas, de sentimientos nobles, de relaciones satisfactorias, de sensaciones agradables, de recuerdos gratos, . . . No merece la pena ocupar espacio alguno con malos rollos, así que vayan fuera, y a empezar otra cuenta y otro año. 


(A ver si en agosto de 2014, no necesito hacer limpieza anual).

viernes, 16 de agosto de 2013

¿Qué celebramos hoy? (Celebración 2.0)


¿Qué celebramos hoy? 16 de Agosto de 2013


Hoy celebramos el primer aniversario (en realidad 1 año y 1 día) de este blog, mi blog, que también es un poco vuestro, porque bebe de vuestras fuentes, se alimenta de vuestra participación y vuestros comentarios, y se fortalece con nuestras conversaciones sobre el mismo.

Gracias a tod@s (entendamos plural genérico para todo lo que viene a continuación: todas y todos) a los lectores activos, a los intrépidos, a los pasivos, a los fieles, a los inconstantes, a los que prometen y cumplen, a los que prometen y bueno.. digamos que lo intentan, a los que aterrizan por aquí de vez en cuando y a los que lo hacen de cuando en vez, a los que me animáis a seguir y a los silenciosos, a los que os frotáis las manos cuando llega un nuevo email y a los que pensáis "otra vez la pesada de Marian", a los que entendeís la diferencia entre pesada y persistente, y a los que no, a los que entienden que para mi las palabras son importantes, por si mismas y no sólo como transmisoras del pensamiento,  y a los que no lo entienden, a tod@s, GRACIAS.

Para mi está siendo una experiencia muy enriquecedora, otro canal, otra manera de hacer algo que me encanta, COMUNICAR. Aglutinar, reunir, ordenar todos los pensamientos, las reflexiones, las conversaciones, las miradas, contároslo a vosotros, me ayuda a entenderlo yo misma y me aporta una luz nueva para iluminar este camino que es mi vida, con sus luces y con sus sombras . . . 

Siempre ha sido así, el camino siempre ha tenido luces y sombras (como el de todo el mundo) pero ahora es más fácil recorrerlo, el blog y la fotografía me ayudan a sacarle partido no sólo a las luces (eso siempre más o menos se me ha dado bien), también aprendo a utilizar, minimizar, dosificar e incluso rentabilizar las sombras . . . toda una lección de vida.


Gracias Liliana., y gracias a Pablo, por destapar la caja de Pandora, jeje

miércoles, 31 de julio de 2013

Cuando tú sonríes al mundo...

Cuando tú sonríes al mundo . . . al mundo no le queda más remedio que devolverte la sonrisa.


Esta mañana mi (flamante) amiga Elena se incorporaba al trabajo tras sus vacaciones anuales y nos mostraba (en foto) la mejor de sus sonrisas para afrontar el día.

Al hilo del acontecimiento, se han cruzado unos cuantos comentarios sobre las actitudes para afrontar las cosas, y de ahí ha salido la frase que da título a la entrada. Reflexionar al respecto y convertir estos pensamientos en una entrada del blog, era el camino natural . . .

Cada día ocurren cosas en nuestra vida, a nosotros mismos o a las personas de nuestro entorno, algunas son hermosas, otras no, algunas nos llenan de alegría, otras nos llenan de dolor, algunas son largamente esperadas y otras repentinas, algunas son fruto de nuestro trabajo, y otras ocurren simplemente porque sí, algunas se repiten en el tiempo y en el espacio y otras son únicas, algunas aún previsibles, no son evitables, porque dependen de las conductas de otros. 

Lo que está claro, es que no podemos decidir sobre lo que nos pasa, pero si sobre como nos lo tomamos. La capacidad de afrontar las cosas con una u otra disposición la tenemos todos, algunos eligen ser esclavos de sus circunstancias y verlo todo negro, otros elegimos amanecer cada día con energías renovadas y empezar la jornada vistiendo nuestra mejor sonrisa, que luego el día ya se encargará de ver que hace con ella, pero que por nosotr@s no quede . . . 

En los últimos tiempos, (no vamos a precisar más, no merece) tengo la inmensa fortuna de haber modificado radicalmente mi entorno (y mi conducta), cuento a mi alrededor con un nutrido grupo de personas positivas, que procuran empezar su día sonriendo y haciéndonos partícipes a los demás de sus sonrisas, contagiándonos su fuerza, sus ganas de afrontar cada nuevo día, poniendo su granito de arena para mejorar su pequeño mundo, al que algunos tenemos el privilegio de pertenecer. Una vez que entras a formar parte de esa dinámica, de forma natural te conviertes en una de esas personas, y amplias el radio de acción, contagiando a su vez, a los de tu propio entorno. No pretendemos arreglar el mundo en general, nos limitamos a intentar mejorar el cachito del mundo al que pertenecemos, y confiamos en que las ondas que se expanden desde nuestro epicentro hagan el resto . . .


Ya sé que no siempre es fácil, para nadie lo es, hay días difíciles, duros, largos, dolorosos, de esos que estás deseando que se acaben . . . pues bien, ése es el día perfecto de irte a la cama prontito y recuperar sueño atrasado, con tu libro, tu CD favorito, tu pareja, un vaso de leche caliente, o cualquier otra cosa que te ayude a terminar el día lo más sereno posible, y pensando que mañana el sol o tu canción favorita en el móvil te despertarán y el mundo estará otra vez ahí, esperando tu sonrisa, para devolvértela.





Como dice mi maravillosa percha:

Que tu sonrisa cambie el mundo, pero no dejes
 que el mundo, cambie tu sonrisa


Ya hablé hace casi un año de sonrisas en:

domingo, 21 de julio de 2013

Yo comunico, tú comunicas ¿ellos comunican?

Soy una persona muy expresiva.


Siempre que hablo de mi blog, o que hablo de fotografía, termino por decir que a mi lo que me gusta es "comunicar" y por eso cualquier forma de expresión que me ayude a comunicar se integra rápidamente en mi vida. 

La comunicación. Siempre ha sido una parte muy importante en mi vida, primero aprendí a hablar, (pronto según mi madre y no he parado desde entonces). Luego aprendí a escribir, en mi época se aprendía en maternales y/o en párvulos (4-5 años). Y no sé en que momento incorporé mis manos a mi lenguaje, pero son una parte intrínseca del mismo, así como mis gestos faciales. 

Hablar en directo. Eso, que siempre ha sido un gusto, además se ha convertido en una herramienta de trabajo, llevo años ganándome la vida dando explicaciones, así que he desarrollado una manera peculiar y personal de explicar cosas tediosas de manera más o menos gráfica (y a veces hasta amena), intentando adaptarla al nivel de conocimientos previos de mi interlocutor. Los que me conocéis en el ambiente laboral ya sabéis de que estoy hablando . . .

Hablar por teléfono. No tengo ningún rechazo a hablar por teléfono, e incluso para cosas de trabajo, prefiero los contestadores automáticos que los que cogen recados de cualquier manera mientras buscan un boli que escriba. Aún faltándome el complemento de los gestos, creo, que consigo comunicar muchas más cosas que las simples palabras: entonaciones, pausas, silencios, elección de un sinónimo y no otro, pueden darle tintes muy diferentes a una conversación.

Escribir. Escribir es casi una necesidad, hace tiempo mi hermana me dijo una frase que se usa en pedagogía y me encantó: "El lenguaje estructura el pensamiento". He reflexionado mucho al respecto de muchas cosas en los últimos años, muchas de ellas están aquí publicadas ya, otras irán llegando, y algunas me las reservaré sólo para mi y/o para las personas para las que fueron escritas. 
Pero ciertamente, escribir sobre algún tema concreto es un deporte de lo más completo, coges un pensamiento que tienes por ahí, con una sensación que guardas en otro lado, lo aderezas con un recuerdo que te perturba, y con todo ello construyes un discurso único, una idea global que puedes convertir en una conversación al otro lado de una taza de café con una amiga, en un par de páginas en una libreta, o últimamente en un borrador del blog, que adquirirá o no, el rango de entrada. 

La Fotografía. Desde que hacia trabajos en el cole, y había que pegar fotos de miriápodos, dibujar mapas de España, o cosas de color rojo, azul o verde, me ha gustado añadir una viñeta a mis cosas, y ayudar a mis hijos en las suyas, (aún conservo la caja de los recortes de "Los Países Dominicales" clasificadas en sobres por categorías: objetos, cosas de comer. deportes, etc . . ., entonces no había Internet para buscar con google y descargar cualquier foto en jpg, o copiar y pegar en el trabajo antes de imprimir). Así que cuando el año pasado empecé con la fotografía más en serio, y me compré la cámara reflex, se convirtió rápidamente en otra via de comunicación con el mundo, y se integró a la perfección en el proyecto del blog, hace ya casi un año. Por eso todas las fotos del blog (salvo algunas muy concretas, perfectamente identificadas) o son mías, o salgo en ellas, pero siempre son alusivas al tema que se esté tratando, a veces me cuesta más escoger la foto que escribir el texto.


Y diréis que a que viene esta declaración de principios, pues bien a que como persona amante de la comunicación, a veces, tengo problemas porque no todos mis interlocutores respetan las reglas, y no hablo solo de la ortografía, que para mi tiene mucha importancia (hay un par de grupos, de carteles y cosillas de esas en mi facebook que lo ponen de manifiesto). Hablo del objetivo en sí de la comunicación y de hecho he buscado un par de definiciones, para que no sean mis palabras sino las de lingüistas las que expliquen, primero  el objetivo último de la comunicación. Y segundo, el significado de la palabra "luego".
"La lengua es el instrumento que permite la comunicación entre los miembros de una determinada comunidad. Es evidente que los hablantes de cualquier lengua necesitan utilizar un código común. Sin embargo, las diferentes circunstancias sociales, geográficas e individuales contribuyen a que existan diferentes formas de usar una misma lengua. Aunque es imprescindible mantener una cierta uniformidad para que la comunicación sea posible".
La segunda es una definición de la RAE, sobre la palabra "luego", porque yo, cuando dudo, tiro de RAE:

luego.
(Del lat. vulg. loco, abl. de locus).
1. adv. t. Prontamente, sin dilación.
2. adv. t. Después, más tarde. Anoche fuimos al teatro, y luego a una sala de fiestas.Estudió derecho, y luego medicina.
3. adv. t. El Salv. temprano ( en las primeras horas del día).
4. adv. m. El Salv. rápidamente ( con celeridad).
5. conj. ilat. Por consiguiente, por lo tanto. Pienso, luego existo. ¿Luego era fundado mi temor?

Por todo ello, me irrita cuando las personas en vez de reconocer las cosas, y disculparse, dicen: "es una manera de hablar" o "yo no quería decir eso" Pues bien, no haberlo dicho, y maneras de hablar hay muchas pero unas son válidas porque hacen la comunicación posible para "ambos interlocutores" y otras no lo son, porque no cumplen el objetivo de trasmitir un mensaje de manera correcta y que signifique lo mismo para la persona que lo emite que para la que lo recibe.


Aclaración, para quién no me conozca, no vivo en El Salvador . . . Y conste que lo publico hoy, porque se tercia, estaba "en el horno" hace tiempo . . . y si alguien se siente identificado, que procure escoger sus palabras mejor en el futuro, como decía ayer: 

y así no hay problemas.


sábado, 20 de julio de 2013

Simple, sencillo, fácil . . .

La simplicidad de un gesto.


El otro día (ese espacio de tiempo que media entre ayer y hace cinco años) estaba viendo una peli en la TV, sin muchas pretensiones, de esas de pasar la tarde y poco más, pero hasta de las cosas más insospechadas puede uno sacar conclusiones. 

Había una niña hablando con una mujer adulta y le preguntaba que porqué no llamaba a alguien con quien debería hablar, la mujer le responde: -"No es fácil". Y la niña, con esa claridad que a veces deslumbra, contesta: -Sí lo es, descuelgas con una mano, y marcas con la otra".

Pues eso, que con lo claro que lo tenemos cuando somos pequeños, y lo que nos complicamos la vida cuando nos hacemos mayores, la de vueltas que le damos a todo, la de excusas que buscamos, la de tiempo que dejamos escapar entre nuestros dedos, para no hacer aquello que sabemos deberíamos hacer . . .

Por eso es tan sumamente gratificante, cuando "cogemos el toro por los cuernos" y obramos en consecuencia, y le decimos a los demás lo que queremos, lo que nos apetece, lo que necesitamos, lo que nos gusta, . . . Y lo que nos importan, lo que nos aportan, lo que significan en nuestra vida, y además engancha, una vez que dejas de lado, timideces, miramientos, y otras limitaciones, te sientes mucho más libre, y disfrutas mucho más de la vida que te rodea. 

Ayer lo hablaba, una vez más, evidentemente, no todas las cosas que hago al cabo del día me apetece hacerlas, ni mucho, menos. Pero hace ya varios meses, que TODOS los días, hago ALGUNA cosa que me apetece, sólo porque me apetece, sea hablar por teléfono con una amiga,  escribir un e-mail pendiente, dedicarle un tiempo a mis fotos, a los pájaros, al blog, a las personas que quiero, o disfrutar del libro que me esté leyendo en cada momento, o pasear, o pensar en mi siguiente proyecto . . . Y como no siempre ha sido así, lo valoro mucho, y digo de mi misma, que

 SOY UNA PRIVILEGIADA

viernes, 12 de julio de 2013

Lo inesperado - O inesperado - Capítulo 3

¡¡¡¡Quieto ahí, lector curioso!!!! ¿Has leído los capítulos 1 y 2?, Si la respuesta es no, (o si te apetece refrescar) deberías de pinchar estos links antes de seguir:



 Lo inesperado - O inesperado - Capítulo 3 

Programó su alarma para las 08:00 y se dispuso a dormir. El sueño se tomó su tiempo, pero finalmente llegó, y durmió, durmió como sólo los corazones inquietos saben hacerlo: moviéndose agitados, saltando, peleando con las sábanas . . .

Cuando él le dijo “Despierta mi reina” en su alarma, ella ya estaba despierta, pero le gustaba escuchar su voz cariñosa para empezar el día. Fue a darse una ducha rápida y se vistió. Escogió unos pantalones negros, una blusa roja con la que se sentía especialmente vital, y aquellos maravillosos zapatos rojos que se compró en el Iguatemí.

Guardó en su bolso la tarjeta del hotel, la nota y la llave y ya a punto de cerrar la puerta dijo: -¡Adios casa, cuídate!- Decididamente, algo la estaba pasando, sólo se despedía así cuando se iba de viaje, y sólo iba a hacer unos pocos kilómetros y pasar la mañana fuera, ¿sería que su subconsciente sabía algo que ella ignoraba?


Adoraba esa carretera, bajar a la playa por esa ruta siempre era delicioso, por mucho que aquellas vueltas y revueltas hicieran más largo el recorrido, asomarse al mar desde lo alto de la Sierra intentando descubrirlo entre la tupida vegetación era sencillamente maravilloso. Una vez en la costa, dirección sur, unos pocos kilómetros más y allí se levantaba bello y sereno el Hotel Victoria Amazónica, destacando entre la vegetación.

Había llegado, aparcó y volvió a sobrecogerse con la vista de aquellos maravillosos jardines que tan bien recordaba ¡Cómo olvidarlos! . Se dirigió a la puerta principal y entró. El hall seguía siendo ese lugar misterioso y delicado que recordaba, con luces y penumbras que ayudaban a mantener su frescor.


Cuando un empleado del hotel se dirigió a ella, abrió su bolso y le mostró la llave. Él le indicó el camino del ascensor y la acompañó hasta la puerta y allí con una enorme sonrisa le dijo -"Planta tercera”-. Entró y pulsó el botón, mientras pensaba en lo peculiar de la sonrisa del botones: ¿maliciosa? ¿divertida? ¿cómplice? No supo encontrar el adjetivo adecuado, pero desde luego algo escondía . . .

Al salir del ascensor, escogió el pasillo “Impares” y fue recorriéndolo lentamente . . . "327-325-323-321-319" . . . y justo en el recodo “317”. Había llegado. Su corazón empezaba a acostumbrarse a ese ritmo frenético con el que latía en las últimas horas, pero ya estaba allí. Podía darse la vuelta, aún estaba a tiempo, correr hasta el ascensor y volver por donde había venido. Pero ya que estaba allí podía echar un vistazo, seguro que todo era una broma de dudoso gusto, pero ¿y si no lo era?

Una vocecilla interior la estaba avisando, (la misma que dijo adiós casa, cuídate) le advertía: “Tu vida no volverá a ser la misma cuando abras esa puerta, ¿estás lista reina?” 

Y mientras asentía con la cabeza, metió la llave en la cerradura,  la giró y cogió aire, una vez más, empujó la puerta suavemente, y cuando entró en la habitación, no pudo contener la emoción, allí ante sus ojos había una reproducción exacta del bungalow, aquel fantástico bungalow en el que fue tan feliz... 

(. . . continuará . . .)

Pôs seu alarme para as 08:00 horas e dispôs-se a dormir. O sonho levou um tempo para chegar, mas ao fim chegou. Dormiu como só os corações inquietos sabem: pulando, mexendo, brigando com os lençóis.

Quando ele falou "Acorda minha rainha" em seu alarme, ela já estava acordada. Foi a tomar um banho apressado. Escolheu umas calças pretas, uma blusinha vermelha e aqueles sapatos vermelhos que comprou no Iguatemi. Guardou na sua bolsa o cartão do hotel, o bilhetinho e a chave e foi para seu carro.

Dirigiu até a praia e estacionou na entrada do Hotel. Como esquecer aqueles jardins . . . Entrou, um moço dirigiu-se a ela, mostrou para ele sua chave, e ele indicou onde ficava o elevador. Percorreu o corredor, e finalmente chegou à porta do quarto 317 . . . -"Ainda posso dar um passo atrás e ir embora"- pensou- "Mas também posso dar uma olhadinha, afinal de contas já estou aqui"

Enfiou a chave na fechadura e girou lentamente, enquanto seu coração batia com força em seu peito . . . abriu a porta e entrou . . . quando entrou no quarto não pôde conter a emoção, era uma reprodução exata do bungalow, daquele fantástico bungalow onde foi tão feliz . . .



sábado, 6 de julio de 2013

La Reina Descalza - Ildefonso Falcones - Literatura IV

. . . aferrarnos a la esperanza de volver a sentirnos mujeres . 


"Las mujeres hemos venido a 
este mundo para parir con dolor, para trabajar y para sufrir la perversión de los hombres [...] Ellos. . . ustedes se revuelven, luchan y pelean ante la infamia. A veces ganan y se convierten en el macho victorioso, otras muchas pierden y entonces se ensañan con los débiles para engañarse y vivir con la venganza como único objetivo. Nosotras tenemos que callar y obedecer, siempre ha sido así. He terminado aprendiéndolo y me ha costado la juventud. Ni siquiera me veo capaz de luchar por mi hija sin la ayuda de un hombre. Si, se lo agradezco –añadió antes de que él interviniese-, pero es la verdad. Nosotras solo podemos luchar por olvidar nuestros dolores y sufrimientos, para vencerlos, pero nunca vengarlos. Aferrarnos a la esperanza, por pequeña que esta sea y mientras tanto, de vez en cuando, sólo de vez en cuando, intentar volver a sentirnos mujeres"

Estamos en la España, de mediados del siglo XVIII, cuando Milagros, una gitana de poco más de 20 años, pronuncia estas duras palabras. De ser una joven altiva, orgullosa, despreocupada y enamorada, ha pasado a ser una mujer herida y humillada, y ver como asume con resignación ese papel de callar y obedecer mientras la maltratan se hace duro, muy duro. 

Hay otras mujeres en el libro: la indomable Ana y la siempre sorprendente Caridad, ver como todas ellas afrontan su suerte , mejor dicho, sus numerosas desgracias, es un ejercicio constante de reflexión.

la reina descalza-ildefonso falcones-9788425350528Con un trasfondo histórico muy duro, el libro refleja una época de gran sufrimiento para los gitanos (hombres y mujeres). Falcones retrata muy dignamente, como los vientos empujan a unos y arrastran a otros (*) y como a unos les sirven para arrugarse y a otros para crecer.

Habría muchas otras frases que podría reseñar de la obra, pero sólo elijo este párrafo, por su intensidad, por su significado, y porque vuelvo a la carga, con lo que decía hace casi un año: La vida de las mujeres en este país ha cambiado mucho en muy poco tiempo, pero no tenemos derecho a olvidarnos de las que nos han precedido y del sufrimiento que han tolerado para llegar a donde estamos, y a la vez tenemos el deber de preservar y aumentar este legado para las generaciones venideras, nuestras hijas, nietas, sobrinas o vecinas... 

En cuanto a la obra, quizás es la que menos me ha gustado de Ildefonso Falcones, a pesar de ser una historia fundamentalmente de mujeres. Pero ¡ojo!, es que tanto "La Catedral del Mar", como "La Mano de Fátima" me apasionaron. El listón estaba muy alto. Se ganó un puesto en mi lista de autores favoritos con su primer libro, y ahí sigue, y espero seguir disfrutando de sus obras, muchos, muchos años.
vientos que empujan : vientos que arrastran-manuel cervera diaz-9788498025668


(*) Esos "Vientos que empujan, vientos que arrastran" están muy bien retratados en la obra homónima de Manuel Díaz Cervera, que además de ser un estupendo escritor, es mi tío.

lunes, 1 de julio de 2013

¿Qué celebramos hoy? 1 de Julio de 2013 (Celebración 1.0)

Hoy hace un año que descubrí un mundo nuevo: La ornitología





Era 1 de Julio, sábado, y mi amiga Ligia nos había apuntado a una actividad de "Itinerario Ornitológico en la Dehesa de la Villa". Así que me levanté prontito, cogí mi cámara y unos prismáticos prestados y allá que me fui . . . 

Ligia llegó tarde, y con su afán de desconexión (no le daba la gana de tener móvil) pues no fue capaz de encontrarnos y  se volvió a su casa y desde allí me llamó . . . 

Así que, me encontré sola, en una actividad que no sabía exactamente en que consistía, ni como se desarrollaba, ni cuanta gente asistía, en fin, que menos mal que una es valiente por naturaleza y allí me quedé. 

Y entonces ocurrió . . . Yo que soy una chica muy de ciudad, y que como digo siempre, de broma y de no broma, distinguía un gorrión, de una paloma a duras penas, de repente, me encuentro inmersa en una actividad que me encanta, conozco parques, paseo acompañada de personas a las que les interesan las aves, y aprendo, aprendo y aprendo cada día un poco, todo ello mientras disfruto un montón. Es sencillamente perfecto.



Desde entonces, ha habido muchos días, muchos itinerarios, muchos parques, muchos talleres de anillamiento, muchas personas con las que he coincidido en ocasiones aisladas o con cierta frecuencia. Procuro salir, al menos, dos veces al mes. Suelo ir sola, aunque nunca me siento sola, porque aunque no conozca a nadie, eso sólo dura los 10 primeros minutos, y en tres horas de paseo, siempre terminas por relacionarte. 

He disfrutado todos y cada uno de los días que he salido, con frío, con calor, nublado o con sol radiante, con mayor o menor éxito en las capturas y/o en los avistamientos. Voy cargada con mi cámara con el 55-200 y ahora con mis prismáticos nuevos, y me vengo más que encantada si me "traigo" un pájaro nuevo bien sea en la cámara o en la retina, y eso que cada día es más difícil ver algo nuevo, pero sigo disfrutando, siempre hay pequeñas variantes. 


En invierno las ramas desnudas de los árboles, la escarcha por la mañana,  los caminos embarrados, las nubes sobre los cortados de El Pardo, todo tiene su encanto. 



En primavera, los cantos, la vida que despierta, los brotes en las ramas. 



Ahora en verano, los "juveniles" que en determinadas especies presentan un aspecto muy diferente de los adultos, los frutos, los colores, las flores, las fragancias, los "patitos" pequeñitos persiguiendo a sus madres, sean fochas, ánades o gallinetas, las advertencias acústicas de éstas cuando se equivocan de grupo. 


Y en el otoño, como cambian las hojas semana a semana, como van pasando por todas las gamas de marrones, dorados, rojizos,  como vuelven las gaviotas, los cormoranes, cada día es un lujo y un regalo.

Y tengo que agradecer a todos y cada uno de los monitores con los que he realizado estas actividades el que me hayan descubierto un mundo nuevo. Las aves conviven con nosotros desde siempre, pero sólo las vemos y las oímos, hasta que alguien nos enseña a mirarlas y escucharlas. 

Gracias Juan, Carmen, Esther, Pablo y muy especialmente gracias a ti, Alfredo.

Conseguí hacer una salida con mi amiga Ligia en El Pardo antes de que retornara a USA (te añoro). Y siempre te estaré agradecida, porque tú fuiste la que me pusiste en el camino . . .




jueves, 27 de junio de 2013

Lo inesperado - O inesperado - Capítulo 2

¡¡¡¡Quieto ahí, lector curioso!!!! ¿Has leído el Capítulo 1?, Si la respuesta es no, (o si te apetece refrescar) deberías de pinchar este link antes de seguir:


Lo inesperado - O inesperado -  Capítulo 2

Cuando abrió los ojos no conseguía recordar que hacía tirada en el suelo. Una sensación extraña la atenazaba, algo le decía que tenía que girar la cabeza, lo hizo lentamente , y allí estaba el paquete.

Girando sobre sí misma fue incorporándose hasta quedar de rodillas enfrentada a él. Respiró profundamente, cerrando los ojos, haciendo acopio de todas sus energías y empezó a rasgar el papel, primero con lentitud, después con creciente nerviosismo.

--¡No puede ser!– exclamó, mientras extraía una caja de lata, idéntica a la suya, del interior del envoltorio. --¡Es todo tan extraño!-- Cerró los ojos, de nuevo, mientras tomaba otra bocanada de aire, y reunía la serenidad suficiente para destaparla…

Una nota manuscrita con tinta verde y aquella letra abigarrada, rezaba “Ven mañana a las 10:00”. La acompañaban una tarjeta del “Hotel Victoria Amazónica” y una llave sujeta a una placa con el número “317”. No podía creérselo, fue un 31 de julio de 7 años atrás . . . -¡No, no puede ser!– susurró.


Necesitaba serenarse, todo aquello la estaba superando. Volvió a dejar los objetos dentro de la caja y puso ésta encima de la mesa. El agua caliente siempre la calmaba, necesitaba serenarse, necesitaba pensar, así que se dirigió al cuarto de baño y se metió bajo la ducha, cambió a “modo cascada”, y un potente chorro descargó sobre sus doloridas cervicales . . .

Todo aquello no podía estar pasando, debía tratarse de una broma de mal gusto, pero ¿quién estaba jugando con ella? Nadie sabía lo que significaba el Hotel Victoria Amazónica, nadie conocía la importancia de la fecha, nadie podría haber escogido la habitación 317. Sólo ella conocía todo el simbolismo que contenían la caja y  sus objetos. Bueno sólo ella . . . y por supuesto: Él . . .

Ya en la cocina, se obligó a comer algo. Por mucho que los nervios se empeñasen en ocupar todo el espacio disponible de su estómago, y el nudo de la garganta tampoco ayudase, tenía que comer algo, habían pasado demasiadas horas desde el almuerzo. -Unos cereales con leche serán suficiente- se dijo a si misma, mientras se preparaba un tazón . . .

De pie, apoyada en la encimera, mientras disfrutaba de las virutas de chocolate crujientes, tomó una decisión: -Iré, veré que todo es una broma, y volveré a casa después de tomar un maravilloso desayuno frente al mar, total ¿Qué puedo perder? ¿Algunas aburridas horas de trabajo? Salir me vendrá bien, el sol, el mar, la brisa, el olor a sal, siempre me cargan las pilas, y está claro que necesito recargarme. Iré-.

(continuará...)


Quando abriu os olhos não conseguia lembrar que estava fazendo deitada no chão. De repente, virou a cabeça e ali estava o pacote. Foi levantando-se até ficar de joelhos perto de-ele, tomou ar, e começou a rasgar o papel, primeiro lentamente, depois agitada. Era sua latinha, abriu-a quase sem fôlego.

Um bilhete escrito com tinta verde, e aquela letra tão esquisita: -"Venha amanhã às 10:00 horas"-, um cartão do Hotel "Victoria Amazónica" e una chave com o número "317" no seu chaveiro . . . Não podia acreditar, foi num 31 de julho , há 7 anos atrás. -Não, não pode ser"- sussurrou. Voltou a deixar os objetos na caixa e pôs esta em cima da mesa e foi colocar-se embaixo do chuveiro . . . 

Enquanto a água arrastava o cansaço do día pensava, e pensava; - Não, não pode ser"- Saiu e foi para a cozinha, tinha que comer alguma coisa, mas seus nervos ocupavam todo o espaço disponível em seu estômago, além do nó que tinha na garganta. Obrigou-se a comer alguns cereais com leite e foi-se à cama.

Lá, deitada, pensou e pensou -não devería ir lá, é impossível, mas e se . . ." Ninguém podia saber o que para ela significava o Hotel "Victoria Amazónica", ninguém podía conhecer o quão especial era a data, para ninguém teria sentido o quarto 317, só ela sabia, sé ela e,  claro, ele . . .

Tomou uma decisão: "Irei, verei que tudo é uma brincadeira e tomarei um estupendo café da manhã em frente ao mar antes de voltar para casa. Que posso perder? Só algumas entediantes horas de trabalho, e sair um tempinho me fará bem".

(. . . continuara . . . )