lunes, 18 de noviembre de 2019

Brunette 7 de 7

¿Huidas hacia adelante?


Estaba preparando una entrada del blog para contaros lo estupenda que fue la experiencia del otro día, disfrutando nuevamente de la sabiduría de Sebastião Salgado y me ha entrado un correo de Brunette, con la que dice ser su última entrada en el blog, espero que no sea así, he estado encantada de colaborar con ella y me gustaría que fuera una falsa alarma, pero no sé yo, que esta chica es muy radical. 

De cualquier modo, que sepas que aquí tienes tu casa siempre, yo te esperaré. Hasta siempre Brunette.


Queridas todas y respetados todos: Hasta aquí hemos llegado. 

No me está haciendo feliz compartir mis cosillas con vosotras/os. No es la experiencia que aspiraba a tener.  Ando permanentemente dividida entre hablar mucho más claro y contaros cosas más escabrosas a riesgo de escandalizar a algunas/os o ser moderada a riesgo de aburrir a otras/os, permanentemente tentada de sobrepasar la linea del decoro, pero sin atreverme a dar el salto. 

En fin, que esto era para disfrutar, y si no es así, no vale la pena.

El fin de semana le pedí a Marian los datos sobre lectura de las anteriores entradas, y aunque empezamos algo mejor hemos ido perdiendo fuelle,  así que no voy a dar más trabajo a mi socia para que elija fotos, adapte formatos y se encargue de haceros llegar mis aventuras. Aquí se acaba. No voy a negarme a mi misma la posibilidad de volver, he hecho y he dejado de hacer demasiadas cosas en los últimos años como para saber que soy muy capaz de sorprenderme a mi misma, pero por el momento esta es mi decisión.

No obstante tenéis mi email, si queréis algo ya sabéis donde encontrarme, y si alguna vez tenéis alguna pregunta de esas que no sabéis a quién hacer porque os de pudor, contad conmigo, es poco probable que me ruborice y a lo mejor tengo un link, una dirección o una opinión de algún producto o lugar que os sorprendería conocer,  o una advertencia. 

No lo dudéis: "abrunetteinapurpleworld@gmail.com"

BeSoS y hasta siempre,

Brunette


jueves, 14 de noviembre de 2019

Brunette 6 de . . .

El modo avión

Dice mi amiga Marian hoy en su estado de Whatsapp: 

El "modo avión", lo mejor para volar . . .

Y yo creo que sé porqué lo dice, es lo que tenemos las amigas, que nos conocemos 😉.

Pero desde luego yo que me paso la vida con el móvil en la mano, tengo muy claro mi uso del "modo avión".

Lo utilizo:
  • Cuando vuelo en un avión comercial, por supuesto.
  • Cuando viajo a un país fuera del área de mi roaming. 
  • Cuando voy al cine, teatro o similar.
  • Cuando duermo a deshoras porque estoy muy cansada.
  • Cuando voy a un SPA.
  • Cuando me dejo abducir por la vida y me abandono a disfrutar lo que me toque, sea esto lo que sea.
  • En las mismas ocasiones que otras se quitan las gafas.
  • Cuando me interesas mucho, así que gánate un modo avión en nuestra segunda cita. Y si durante la primera saco el teléfono del bolsillo, antes de enfadarte conmigo, espera,  a lo mejor lo he sacado para poner el modo avión, y esa es una estupenda señal.

Hoy me apaño yo sola la imagen Marian, hasta aqui llego, jajaja.


lunes, 28 de octubre de 2019

Lo intenso también se disuelve

Unas veces se gana, y otras se pierde




No lo escribí entonces, aunque estuve mil veces a punto. Fue justo hace dos años, un día intenso, muy intenso, repleto de emociones. Canté, lloré, reí, vibré, disfruté con todo mi ser. Amaral tuvo la culpa, el concierto en el Wizink era el final de un largo camino, por fin, después de varios intentos fallidos conseguí estar allí. 

Compré dos entradas meses antes, el primer día de la venta, aunque no conseguí ser de las 100 primeras y me quedé sin mi regalo especial. Pero marqué la fecha en mi agenda, primero para la venta anticipada y luego para el concierto, con ese color Rojo Intenso que tienen en mi agenda los eventos de Ocio. Durante todo ese tiempo pensé con quién quería compartir aquella experiencia que para mi era muy importante, y al final decidí que fueras tú. Te lo propuse y tardaste en decirme que sí, pero di por bien empleada la espera, porque la respuesta final fue SI. 

Diréis "un concierto más", "has ido a muchos importantes en los últimos años", siempre bien acompañada: Fito, Manolo García, Ara Malikian, Roger Waters, Caetano Veloso, Caetano e Gilberto . . .

Es verdad, lo he pasado genial en todos ellos, pero Amaral era otra cosa, sabía que iba a ser algo muy emocional, marcó un antes y un después en mi vida el año que me separé, allá por el 2006 "El Universo sobre Mi" se convirtió en mi motor, unos meses antes "Días de verano" me arrancaba lágrimas en la cocina. Años después llegó "Nocturnal", y ha vivido en mis MP3 desde entonces. Me costaría elegir un tema, todos significan mucho, es fácil que encontréis alguna frase de una canción en mis estados de whatsapp, que me oigáis canturrear mientras camino y sobre todo mientras trabajo. ¡Cuantas horas de curro hemos pasado juntas Eva!, tú no lo sabes, pero yo si.

 Y por fín llegó el 27 de octubre de 2017 y me duché y me vestí y salí a vuestro encuentro, primero a juntarme contigo y luego ambos con Amaral, tras tomarnos un vino en un bar cercano. Entramos, buscamos nuestras (estupendas) localidades, y charlamos (de tu barba entre otras cosas) hasta que se apagaron las luces. Cuando la luna llena iluminó el escenario se me hizo un nudo en la garganta que tardé días en digerir. Canté, soñé, sentí todo aquel torrente de emociones a tu lado, por eso tenías que ser tú, con nadie más me habría sentido cómoda al desnudarme de aquella manera ante alguien, lo de quitarse la ropa es una nadería . . .

Desde "Unas Veces se Gana y Otras se Pierde" a "Noche de Cuchillos", "Nocturnal" pasando por "El Universo Sobre Mí", cantando desde el fondo del estómago, mientras las lágrimas se deslizaban por mis mejillas (y tú allí parado, no sabiendo muy bien como gestionar ese torrente de emociones), una canción tras otra "La Niebla", "Noche de Cuchillos", "Cazador" y nuevamente un himno para mi, para esta década que toca a su fin: "500 Vidas".

Han pasado dos años, ya no somos los mismos, estamos lejos, muy lejos, ya no te escogería a ti, por eso quizás este año no he comprado entradas para el concierto de Amaral. Ya no formamos parte de la vida del otro, me cansé de ser yo siempre la que se negaba a que nos quedáramos sin. Siempre hemos tenido una relación muy especial, hemos pasado momentos muy intensos juntos, nos conocemos con los ojos brillantes de la emoción y eso es algo que no compartimos con casi nadie, ni tú, ni yo.  Pero todas las historias tienen un fin, cuando alguien abusa de los puntos suspensivos, otro alguien decide poner un punto y final, y esta vez fui yo.

lunes, 2 de septiembre de 2019

Mis esenciales. Parte VI. Portugal

Mi historia de amor


Portugal 2014 - Norte (Porto)
Creo que a estas alturas a nadie se le escapa ya que tengo un idilio. 

Cada año corro a sus brazos, a veces volando literalmente, otras por carretera. Pero no son sólo esos días, ese es el broche que cierra cada temporada, nada más y nada menos, el que me deja ese regusto en los labios de querer siempre más, como los buenos amantes . . .

Saber que siempre me he dejado olores por disfrutar, sabores por paladear, escenarios por ver, sensaciones que me zarandearán los sentidos y harán latir más fuerte mi corazón. Sentir como algo cálido te invade y recorre tu cuerpo cuando te sientes bienvenida. Entonces miras al frente y dices "Ya estoy aquí" y tus palabras resuenan con ecos de hogar, con sonidos melódicos, notas que el viento devuelve a tus oídos y que se mezclan con tus latidos, para serenar tu alma después de tanta ausencia.

Aunque en realidad no es ausencia, nuestro idilio no solo se vive unos pocos días al año. Se anticipa en cada publicación que leo, en cada foto que veo, en cada marca en nuestro mapa, en cada anotación en el cuaderno, en cada archivo guardado en nuestro Drive. 

Te sueño, te pienso, te deseo, te paladeo en cada búsqueda, me anticipo imaginando cada encuentro. Tienes la propiedad y el usufructo de una porción de mi corazón que sólo a ti te pertenece, aunque pueda compartirlo con otras personas.

Porque eso es lo grande de nuestro idilio, que no es excluyente, que te puedo disfrutar sola o en compañía y que no me importa que otros también disfruten de ti, es más lo fomento. me gusta que otros te amen y te deseen . . .

Te conocí tímidamente hace muchos años, allá por 1986, pero aunque me caíste bien, andaba yo estrenando un amor que me absorbía. 

Nos reencontramos en 1998, aquél no fue un buen verano, no estaba en disposición de encariñarme con nadie. 

Hasta 2011 no se produjo la magia, en aquellas playas de lava, en aquellas aguas frías y cálidas a la vez, en aquellos horizontes con sabor a sal.

En 2012 la vida nos juntó unas horas, sólo unas maravillosas horas, de sol, de reencuentro, de darme cuenta de lo que podía pasar. Para entonces ya me estaba preparando para ti, para llegar a tus brazos acicalada para la ocasión.

Pero la ocasión no se produjo en 2013. Tuvimos que esperar un año más.

Por fin llegó el 2014 y ya me pude ir a disfrutar de ti plenamente. Una experiencia única e irrepetible de introspección de mirarme a mi misma en ti, de sentirme dueña de mi y de lo nuestro. Fue el año que formulé en voz alta mi amor por ti, y desde entonces no he faltado ni una sola vez. Te he ido presentando a mis amigos, adaptándome a tus peculiaridades, disfrutando de tu singularidad de todo lo que te hace único y querido.


Ahora acabo de regresar y aún conservo tu sabor en mis labios, las cervezas a orillas del mar, los vinhos verdes, una canjinha calentando mi estómago y mi alma a partes iguales, un baño salado en tus añoradas playas, un baño dulce en tus deseados ríos, un atardecer desde un acantilado, la música de Cabo Verde a orillas del mar, tus grandes ciudades y tus pequeños pueblos, reencontrarme con espacios que conozco y adoro, y seguir conociendo tu anatomía, aunque algunos lo llamen Geografía, porque si, a estas horas creo que todo el mundo sabe que mi idilio tiene nombre de país, y ese es PORTUGAL.


Portugal 2011 - Açores
Portugal 2014 - Norte (Porto)

Portugal 2015 - Lisboa

Portugal 2016 - Norte (Guimarães)
Portugal 2017 - Lisboa

Portugal 2018 - Porto

Portugal 2019 - Centro (Coimbra)







sábado, 3 de agosto de 2019

Ya no me duele

Una historia paralela

Hubo una temporada en la que me dolía una muñeca, la derecha en concreto. No era una cosa horrible, ni repercutía mucho en mi vida diaria, sólo cuando hacía determinadas cosas como coger una cazuela llena con una sola mano, dejando la palma virada hacia arriba, o apoyarme en ella más de la cuenta al levantarme tras un rato tumbada, en fin, en algunas ocasiones me recordaba que seguía ahí, y reclamaba su espacio.

Me acostumbré tanto a esa situación que ya apenas la notaba, simplemente evitaba hacer aquellas cosas que me acercaban al dolor, se convirtió en un capítulo más de mi vida en mantener a raya (otro más). 

Un buen día me despisté, llevaba el salvamanteles en la mano izquierda y cogí la cazuela, bastante llena, con la mano derecha y de repente caí en la cuenta que ya no me dolía, estaba tan acostumbrada al dolor que no me di cuenta que me había abandonado. No sé cuando me dejo de doler.

Lo mismo me pasó con tu amor, un buen día volví la cabeza y me di cuenta de que ya no me dolías. No sé cuándo te dejé de querer, no sé cuándo me dejaste de doler.


domingo, 14 de julio de 2019

Borrón y cuenta nueva

Limpieza de primavera


Abrir el armario, arramplar con todo y empezar de cero. Todo nuevo, todo a estrenar, todo mirado con ojos de ilusión, ¿os parece tentador? A mi no, sinceramente, soy muy de encariñarme con las cosas. Me cuesta mucho renunciar, me cuesta asumir que ya no voy a volver a ponerme esa camiseta que tanto me gustaba, a fin de cuentas yo cambié, ella también y nuestros caminos ya no se cruzan. Necesito dejar perchas libres en el armario para acoger esa camisa nueva que promete hacerme disfrutar de su suave tacto, o de ese escote que tanto me favorece, o ese vestido tan fresco, que me acompaña a mi nueva oficina. 

Pero no voy a tirarlo todo, aunque ya han ido a la basura varias prendas queridas, como ese camisón brasileiro que tantas noches albergó mi piel. Voy a racionalizar los espacios, dejando más a mano aquello que más me soluciona, aquello que más me complace, y en ese cajón menos accesible aquello que tuvo un espacio importante en mi vida, pero ya no lo tiene, y conservaré todas aquellas cosas que aún puedo volver a ponerme en cuanto pierda alguno de esos kilos que me sobran, me dará mucha alegría volver a recuperar algunas prendas, estoy segura. 

Para ello es imprescindible analizar, cuanto tiempo hace que no me pongo esa prenda, si es porque no es de mi talla actual o simplemente porque pertenece a una época que ya no me representa ¿Me voy a volver a poner un traje de chaqueta con falda de tubo y americana clásica? Lo dudo mucho. Hay prendas que ya no son yo. O yo ya no soy esas prendas, son como me gusta decir de "mi otra vida" porque yo tuve otra vida, tan distinta de esta, que las personas que me conocen de 8 ó 10 años para acá ni imaginan.

Pues bien, mi limpieza de primavera del armario la voy a llevar a cabo en verano, porque se me ha echado la estación encima sin empezar. 

Pero no sólo voy a hacer limpieza de primavera en mi armario. Este año ha tocado cambiar todo mi dormitorio, con esos mismos criterios permanecen algunas cosas, las más queridas, mis libros, mis sellos, mis diccionarios, de hecho tengo una librería más, cada cual arrastra sus vicios, pero el espíritu de mi habitación (mis dominios como suelo decir) ha cambiado, junto con el color de las paredes. Y el cambio me ha sentado bien. 

En vista del éxito, con los mismos criterios que estoy utilizando para limpiar mi armario, he decidido limpiar mi agenda y al paso mi corazón:

  • Apartado UNO. - Conservar a mano lo que me viene bien. 

  • Apartado DOS. - Almacenar en el maletero todo aquello que pueda recuperar más adelante. 

  • Apartado TRES. - Desterrar lo que ya no me encaja. 


Para eso hay que decidir en que categoría encajas cada cosa, cada relación, cada persona, cada recuerdo, y ponerlos en su lugar. Lo que te dejas a mano es relativamente fácil, está claro que te pones cada semana (y con quien te relacionas con asiduidad). Este Apartado UNO está chupado. 

El apartado TRES también es relativamente sencillo, si hace más de 5 años que no te lo pones, (si no habláis nunca o cuando lo hacéis es por compromiso puro y duro o por conveniencias sociales, o porque te reclaman por conveniencia) al Punto Limpio, sin miramientos.

El apartado DOS es sin duda el más complicado, porque tendrás tentaciones de dejar algunas cosas en el UNO, cuando realmente no te las vas a poner, porque aunque tú quieras, te sientan como a un santo dos pistolas . . . y tendrás la tentación de apartar al TRES otras cosas que a lo mejor se merecen una segunda oportunidad. El apartado DOS es el más difícil de delimitar. (Y con las personas aún más porque alguien puede acabar sufriendo).

Una vez decidido a que apartado lo vas a enviar es el momento de prepararlo para su viaje, también aquí el apartado DOS será el más complicado, lavarlo lo lavo, pero ¿lo plancho? O lo dejo para planchar cuando me lo vaya a poner más adelante, ¿lo pongo en el fondo de la caja del último rincón o en primera linea de la más cercana como ese bolso que adoro? ¿Lo separo por probabilidades de que me lo ponga? ¿o por temporadas? ¿o por tallas?.

¿Y qué hago con las personas del apartado DOS? Pues yo creo que "guardarlas limpias" como la ropa. Así que esto es un aviso para ellos y ellas:

Quedáis liberados de cualquier obligación que hubierais contraído conmigo, no me debéis cenas, ni paseos, ni helados al atardecer, ni esa llamada para ver cuando nos vemos, ni hacernos un cine juntos, ni viajar a Portugal conmigo (aunque sigo pensando que ir a Portugal conmigo es un chollo). No me debéis nada, no espero nada y no quiero nada porque sea un compromiso previamente adquirido, "ego te absolvo". 

¿Eso quiere decir que no quiero nada con vosotros? Para nada, quiere decir que ya no espero nada de vosotros, y que si decidís llamar a mi puerta o a mi teléfono, Whatsapp, Messenger o lo que sea, será porque queráis formar parte de mi vida, e incluso pasar al Apartado UNO, que indiscutíblemente está mucho más cerquita de mi corazón. 

La limpieza de agenda ya ha empezado, me he comunicado individualmente con algunas personas y les he hecho saber que dudaba si dejarlos en el UNO o en el DOS. Y sus respuestas me han ayudado a decidir. 

Si alguien del Apartado TRES me leyera por casualidad y quisiera salir del Punto Limpio, casi seguro que está a tiempo, pero es improbable que me lea y que me lo diga . . . aún más.

P.D.- Todo esto no se aplica a los préstamos, si tengo algo vuestro os lo devolveré y espero de vuelta mis cosas, sin prisa, pero sin olvidar y si parece que soy yo la que me olvidé de algo, reclamad por favor. 


lunes, 1 de julio de 2019

Brunette 5 de . . .

¿En tu cocina o en la mía?

Charlábamos Marián, una amiga suya (si quiere identificarse que lo haga libremente) y yo la otra tarde, sobre lo divino y lo humano, sobre todo lo humano, que nos gusta más y cuanto más terrenal, mejor.

Pues bien, hablábamos de que en esta época de talleres, sesiones formativas, clases magistrales y "coaches", hay nicho de mercado para una formación más, un área desatendida con la que echar un cable a los hombres, y por ende a las mujeres también, en esa asignatura que tantos y tantos suspenden: "el día después".

Has sido atento, has sido amable, has sido divertido, te has preocupado de organizar unos preliminares como está mandado, todo ello nos ha llevado a pasar una velada (o noche, o día, o finde o lo que sea) estupenda y agradable. Hemos disfrutado de nuestros cuerpos, de caricias, de besos, de un sexo saludable y apasionado, ambos hemos gozado (nos hemos dado perfecta cuenta ambos).

Pero ahora debemos volver a nuestras vidas. Un beso apresurado:

     - Un placer.
     - O varios - respondo.
     - Nos vemos.
     - Seguro.

Y cada uno cierra su puerta, la del coche, la de casa, ¿la del alma? Pues no, nosotras no cerramos esa puerta en ese momento, pero vosotros si.

Decís que somos difíciles de entender, de complacer, y no es cierto. He hablado con muchas mujeres de esto, y todas queremos un mensaje, una llamada, un whathsapp, un SMS un algo que diga: "Lo he pasado muy bien", "Ha sido agradable", "Qué tengas un buen día", "Te pensaré a la hora del café", etc. Cualquier pequeño gesto que nos haga sentir que lo de hace unas horas entre las sábanas no fue un espejismo, y si estamos en vuestra casa no hace falta que nos traigáis el desayuno a la cama, de hecho yo nunca desayuno sin lavarme los dientes, pero no nos dejéis irnos sin desayunar juntos, aunque sea un café soluble de pié en la cocina.

BeSOS, 

Brunette

P.D. Y ahora Marián, busca una foto...


Si este es el "pre"

Este no debe ser el "post"

¿Te valen 3? ¡Creo que lo he pillado!
Marian
  

viernes, 17 de mayo de 2019

Mahalo - Proyecto 2019

Mahalo significa Gracias



"Todos los días en el Hospital son un poco iguales, que si el termómetro, que si las medicinas, que si viene el médico y nos pregunta que tal nos encontramos, que si vamos al aula a leer o a hacer algo de Mates o de Cono, algunas visitas por las tardes, en fin, un poco igual siempre, pero a veces, ocurren cosas . . .  

Como hoy. Han venido unas señoras con unos cestos muy grandes llenos a reventar, y cuando han levantado las tapas, han empezado a sacar unos paquetes transparentes que tenían dentro un muñeco y un papel enrollado, y nos han dicho que eran para nosotros, que podíamos elegir el que quisiéramos.

Yo he escogido uno muy alegre, con una gran sonrisa, y cuando lo he desenvuelto he visto el papel enrollado y me he encontrado con un cuento que me ha escrito un niño como yo, que está en un cole de fuera del hospital. Además del cuento, me manda muchos besos y deseos de que me cure prontito,

Luego, una de las señoras me ha explicado la magia de los muñecos, me ha dicho que se llaman Mahalos y que aunque son todos diferentes, son todos iguales, son de distintos colores y tamaños, llevan trajes distintos, pero todos tienen una gran sonrisa debajo de los bigotes, porque son gatos, todos ellos. 

Luego me ha explicado porqué son gatos. Dice que son para ayudar cuando nos desinflamos, cuando estamos tristes o desanimados, como cuando al abuelo se le desinfló una rueda del coche y entonces sacó un gato del maletero,  para arreglarlo, pues igual, dice Eugenia, (que así se llama la señora que me ha dado mi gato), los nuestros funcionan parecido, cuando estemos desinflados, sólo tenemos que abrazarlos fuerte y el corazón que lleva cada Mahalo, nos dará fuerzas para seguir un día más en el Hospital y seguir curándonos poco a poco. 


Cuando me ha contado todo eso, yo le he dicho: ¡Mahalo, Eugenia! porque Mahalo, significa Gracias."


Esta es la tercera entrega de un proyecto solidario que llevan a cabo unas personas estupendas en un colegio de Madrid, en el que los niños de 8-10 años escriben cuentos para otros niños que están hospitalizados y muchas tejedoras de toda España tejen uno o varios muñecos para contribuir y aportar un granito de ilusión a los niños que se encuentran hospitalizados. Participar de alguna manera en proyectos como este es un regalo, yo no tejo, pero escribo y colaboro con la difusión, todos podemos poner un granito de arena. Si creéis que el regalo es sólo para los niños hospitalizados, os equivocáis, el regalo es también para todos los que colaboramos. Mahalo



















Las fotos se las he cogido prestadas a Eugenia de su Facebook, sé que cuento con su aprobación.

Si queréis saber más:



jueves, 18 de abril de 2019

Porque la vida se nutre de vida

Primavera, al fin . . .


Dice Fito en una de sus canciones "Sé que tengo que olvidar este frío mes de enero, luego volveré a brillar de nuevo". Yo siempre lo he sentido así, aunque para mí, enero no es sólo un mes, es prácticamente una estación.

Este invierno ha sido especialmente complicado, muchos cambios en mi vida,  muchas tareas, algunos conflictos latentes, problemillas de salud, un poco de todo, los cambios laborales que me han supuesto un desafío, el vértigo de no estar a la altura, el sentimiento de "no controlar" mi trabajo, la fatiga de aprender tantas cosas nuevas en tan poco tiempo, en fin, que aunque mi trabajo sea seguro, no os creáis que está libre de presiones, máxime si tu peor jefe eres tú mismo y te gusta tenerlo todo ordenado y bajo control, el mirar al caos de frente me altera, aunque nunca he sido cobarde. Pero ya pasó. 

He sobrevivido a otro invierno más, en el que además, no me he sentido tan respaldada como en otros momentos de mi vida, me he embutido varios "marrones" de envergadura entre pecho y espalda y pocos sabéis de ellos. Pero ya pasó.

Además, a pesar de mi precariedad, he invertido energías en intentar mantener el contacto y la cercanía, con personas a las que quiero, y con las que he tenido mucha relación, ruido de grillos . . . Pero ya pasó.

He tenido que renunciar a proyectos personales, porque no me daba ni la vida, ni la cabeza, ni el corazón, así que he tenido que dejar lo de estudiar catalán para más adelante, y solicitar mi baja en el curso. Por la misma razón llevo varios meses sin leer. Pero ya pasó.

He pasado muchas semanas lejos de mis paseos, del patio de mi casa, de mis gaviotas y mis ánades, de mi maravilloso río naturalizado. Pero ya pasó, con o sin lluvia vuelvo a ti.


He pasado una época de sequía fotográfica que incluso me ha mantenido alejada de mi flamante cámara nueva, a excepción de mi viaje a Cabo Verde en el que mi vida se centró en estrujar mi Nikon, los paseos por la playa, las relaciones sociales con los caboverdianos, todo un placer, un absoluto oasis de 11 días,  en mi desierto  invernal. Pero ya pasó.

A veces cuesta trabajo saber cual es el camino a seguir
Lo bueno de todo esto, es que ya pasó, hace aproximadamente dos semanas que se acabó mi invierno, he recuperado el parque, los paseos, las fotos, los proyectos, las relaciones con las personas que desean formar parte de mi vida, he compartido cine, teatro, algunas cenas, incluso copas nocturnas, horas de conversación con gente muy querida a la que añoraba muuucho. 

He mantenido largas conversaciones en las que me he reafirmado en que soy una persona generosa, a la que le gusta mucho compartir, que me hace extremadamente feliz poder ayudar o agasajar a los que quiero, dedicar mi tiempo a facilitarle la vida a los míos, en lo que pueda, en lo que sepa, en lo que esté a mi alcance, sea cocinando, cosiendo, haciendo papeleos, hablando, escuchando, riendo, y a veces hasta llorando, cuando eso es lo que toca, aunque procuro que eso sea sólo un desliz . . . Y eso no se pasó y espero que no se pase nunca. 

Así que empecé con música, y con música acabo, una de mis bandas sonoras, especialmente en estos últimos días, ahora mismo, en mis oídos: Amaral.

"Quiero regresar a este lugar donde el tiempo aún me pertenece [...] Quiero que mi espíritu inmortal vuelva a la vida cada nuevo día [...] Quiero tener 500 vidas".

Siempre hay luz al final del túnel

Y de momento, esta noche empezaré un libro nuevo . . . ¡He vuelto!


sábado, 13 de abril de 2019

Brunette 4 de . . .

Sin gafas, por favor: de besos y otros placeres 


Hace unos días tuve una conversación de esas muy intensas e íntimas con mi amiga Marian, sobre el mar, los placeres y las gafas, y le dije:


- ¿Por qué no escribes eso en el blog? 

- Me da pudor
- ¿Estás boba?
- Puede . . .
- Déjame que lo escriba yo
- Vale, pero no te pases
- Bueeeeeno, lo intentaré.

En fin que lo he escrito para que lo publique el día 13 de abril, Día Internacional del Beso, una ocasión estupenda para hablar de placeres, y de cosas que se hacen sin gafas. 


Últimamente he reflexionado mucho con las gafas en la mano, mis gafas son una extensión de mi, y me permiten disfrutar de muchas cosas que me encantan: leer, escribir, cocinar, observar aves, hacer fotos, en fin, muchas de las cosas agradables que hago en mi vida, exigen de su colaboración, pero no todas.

Paseando por la playa, descalza, con poca ropa, sintiendo el sol en mi piel, el viento en la cara, y en mi pelo, el sonido del mar en mis oídos y esas olas desvergonzadas que no siempre se conforman con mojarte los pies y suben descaradas por tus piernas, a saber con qué libidinosas intenciones. 

En fin, en ese momento, con las gafas en la mano, me doy cuenta de que cada día tengo más asociado el gesto de quitarme las gafas con el placer, placeres privados, a veces sola y a veces acompañada pero siempre con personas muy escogidas. 

Me quito las gafas para ducharme, me las quito para dormir, para tomar el sol, para bañarme en el mar, o en la piscina, para que me laven la cabeza en la peluquería. Para, sentada en un banco, dejar que el sol primaveral penetre mis párpados cerrados, siempre con la barbilla levantada, para escuchar música en ocasiones, en fin, todo muy placentero . . . 


Y por supuesto, siempre reposan en un mueble auxiliar,  junto con mis pendientes y mi colgante,  en esas ocasiones en que al sol o a la sombra, con o sin música, con o sin agua, con los ojos abiertos o momentáneamente cerrados, mis sentidos al completo y yo, nos dedicamos a disfrutar, sin más . . . y todo ello, siempre empieza por un buen beso.
BeSOS, 
Brunette

(Las fotos de MarianDiazRAM, como siempre)


domingo, 6 de enero de 2019

Carta a los Reyes Magos

Carta a los Reyes Magos


Queridos Reyes Magos: 

Estoy a punto de irme a la cama y aunque he sido bastante buena, no me parece que mañana cuando me levante vaya a tener aquello que os pedí ya hace tiempo. Otro año más me quedaré sin. 

A pesar de que estoy aprendiendo, la paciencia no es precisamente una de mis virtudes. Si dispongo de altas dosis de positividad y bien sabéis que intento afrontar cada día desde la ilusión y con la mejor de mis sonrisas, no es un propósito de año nuevo, es un objetivo diario, desde hace varios años.

Que si, que ya sé que hay gente que lo está pasando mal, que tienen mucho menos que yo, que . . . lo sé, también me habéis oído decir muchas veces que soy una privilegiada, que dispongo de mi vida, mi trabajo, mi hogar, mis amigas, mis aficiones y una capacidad de disfrutar de las cosas casi intacta, a pesar de la vida y de los obstáculos. 

Pero también sabéis que me faltan algunas cosas que deseo encarecidamente y que me sobran otras que me hacen mucho daño. 

Así que igual que yo me voy a poner las pilas en empezar todos mis nuevos asuntos de 2019 con "Corazón y Coraje": el nuevo trabajo, mis nuevos estudios, mi próximo viaje, os pediría por favor, que vosotros también le echéis el resto para traerme mi regalo deseado, ya sé que no va a ser el día 6, pero a ver si el año que viene no lo tengo que poner nuevamente en mi carta.


Con cariño,

La niña que habita en mi