Desconsuelo
Y lloró desconsoladamente, y sus lágrimas se deslizaron por la piedra, y se filtraron por los intersticios de su alma,
Y empaparon las flores marchitas,
Y desde las alturas, silenciosas figuras velaban su llanto,
Y el maestro se preguntaba cuantas lágrimas le quedarían por derramar,
Y de repente, se dio cuenta, que su pesar
la había abandonado, que ya no le quedaban más lágrimas, el duelo había
terminado,
(Onward and upward!!!! Like me, thanks Emma)
Gracias mamá, porque siempre nos llevaste "al jardín de la abuela" y eso nos enseñó a no sentirnos mal en los cementerios, a saber afrontar la muerte, y a saber afrontar la vida.
Estas fotos fueron realizadas el 1 de febrero de 2014 en una visita al cementerio de la Almudena.